Después de varios intentos para acordar día y hora y poder entregarle lo que le hacía falta, hemos quedado hoy, entre 6 y 7 de la tarde. Son más de las diez de la noche y aquí nadie vino y nadie llamó. La acabo de bloquear de porque si me quisiera ahora dar una explicación ya me da igual. Es cierto que pueden surgir complicaciones de última hora, pero ufff, la verdad es que cansa.